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“Mi casita” de Vivir Quintana: el primer capítulo de diversas historias de libertad y resistencia

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Vivir Quintana, una de las cantautoras más importantes del momento continúa sumando en la escena musical mexicana al interpretar corridos que cuentan historias reales de mujeres que fueron privadas de su libertad física por defenderse de sus agresores, haciendo de su arte un vehículo para la sensibilidad y la denuncia.

Pocas obras tan vibrantes y necesarias como la de Vivir Quintana, quien ha convertido su música en espacio para la expresión, resistencia y visibilización de las injusticias estructurales en nuestro país y en el mundo. Todo con su particular potencia y precisión para construir narrativas que mueven por su fuerza.

El último lanzamiento en la carrera de Vivir Quintana lleva por nombre Mi casita. Es el primer sencillo de su segundo álbum discográfico en el que la cantautora, activista y normalista explora las posibilidades musicales y artísticas del corrido a través de ritmos e instrumentos como el acordeón, el contrabajo y las docerolas (guitarras de 12 cuerdas) para visibilizar historias reales contadas en primera persona, que suceden cada día en México y cuestionando, también así, la perspectiva y lírica tradicional machista con la que históricamente se han cantado los corridos en nuestro país.

Con influencias musicales como Violeta Parra, Judith Reyes, Amparo Ochoa, los Tigres del Norte y los “farafara” de su región lagunera de Coahuila (que se conforman por tololoche, acordeón y guitarra o bajo quinto), Vivir nos lleva con “Mi casita” a conocer la vida de una mujer en prisión quien, ante la imposibilidad de libertad y justicia, con el tiempo acaba poco a poco convirtiendo la prisión en su casa, encontrando en el camino una familia conformada por otras mujeres que, como ella, acabaron ahí por defenderse “de más”.

Vivir Quintana busca generar conciencia respecto a estos temas tan delicados y de los cuales se habla tan poco en sociedad, dar arte y voz a mujeres que han sido víctimas de las violencias más extremas para reflexionar respecto al amor, la ternura y la justicia a través de historias de mujeres que han defendido a sus hijos, sus familias y a sí mismas. Todo para construir empatía y sumar a la posibilidad de que las mujeres y las niñas vivamos en un mundo libre de violencias.